Reacciones Adversas
Pueden presentarse mareos, somnolencia, reacciones cutáneas, rash, sequedad de boca, insomnio, amenorrea, fatiga, debilidad muscular, anorexia, galactorrea, visión borrosa y reacciones neuromusculares (extrapiramidales). Reacciones neuromusculares (extrapiramidales):estos síntomas se observan en una cantidad importante de pacientes hospitalizados por alteraciones mentales. Se pueden caracterizar por inquietud motora, de tipo distónico, o pueden asemejar un parkinsonismo. De acuerdo con la intensidad de los síntomas, se deberá reducir la dosis o interrumpir la terapia. En caso de reiniciar el tratamiento, se deberá utilizar una dosis más baja. Si estos síntomas se presentan en niños o embarazadas, se interrumpirá la administración del fármaco en forma definitiva. En la mayoría de los casos, se logrará el control del paciente mediante el uso de barbitúricos por la vía de administración adecuada. (La administración de clorhidrato de difenhidramina puede ser de utilidad). En los casos más graves, la administración de un antiparkinsoniano (excepto levodopa), por lo general produce una regresión rápida de los síntomas. Deberán instituirse medidas de soporte apropiadas, tales como mantener un flujo aéreo adecuado e hidratar al paciente. Inquietud motora:los síntomas pueden incluir agitación o desasosiego y, ocasionalmente, insomnio. A menudo desaparecen en forma espontánea. A veces se asemejan a los síntomas neuróticos o psicóticos originales. No se deberá incrementar la dosis hasta que los mismos se hayan resuelto. Si esta fase resulta muy molesta, por lo general resulta posible controlar los síntomas reduciendo la dosis o utilizando un fármaco alternativo. El tratamiento con antiparkinsonianos, benzodiazepinas o propranolol puede ser de utilidad. Distonías:los síntomas pueden incluir: espasmo de los músculos del cuello, que en ocasiones progresa a tortícolis; rigidez de los músculos extensores de la espalda, que puede llegar a opistótonos; espasmo carpopedal, trismo, dificultad en la deglución, crisis oculógiras y protrusión de la lengua. Usualmente se resuelven a las pocas horas y, casi siempre, dentro de las 24 a 48 horas de interrumpida la terapia. En los casos leves, a menudo es suficiente con tranquilizar al paciente o administrar un barbitúrico. En los casos de intensidad moderada, los barbitúricos por lo general brindan un alivio rápido de los síntomas. En los casos más graves en pacientes adultos, la administración de agentes antiparkinsonianos, excepto levodopa, usualmente produce una rápida desaparición de los síntomas. También puede resultar efectiva la administración de cafeína con benzoato de sodio por vía intravenosa. En los niños, por lo general basta con contener al paciente o administrar un barbitúrico. (También puede ser útil emplear clorhidrato de difenhidramina inyectable). Si el tratamiento con antiparkinsonianos o con clorhidrato de difenhidramina no logra revertir los signos y síntomas, se deberá reconsiderar el diagnóstico. Seudoparkinsonismo:los síntomas pueden incluir: facies inmóvil; salivación; temblor; movimientos espontáneos (rodar píldoras); rigidez en rueda dentada y marcha hipocinética. Es importante contener y sedar al paciente. En la mayoría de los casos estos síntomas se controlan fácilmente con la administración concomitante de un antiparkinsoniano. Estas drogas deberán administrarse únicamente cuando resulte necesario. En general, una terapia de algunas semanas a 2 o 3 meses será suficiente. Después de ese lapso, se deberá evaluar al paciente para determinar si necesita continuar con el tratamiento. (Nota: no se ha demostrado la eficacia de la levodopa en el seudoparkinsonismo.) Ocasionalmente es necesario reducir la dosis de STELAZINE® Comprimidos o suspender la terapia. Disquinesia tardía:como ocurre con el resto de los agentes antipsicóticos, los pacientes sometidos a terapias prolongadas pueden desarrollar disquinesia tardía durante o después del tratamiento. Con una frecuencia mucho menor, este síndrome puede aparecer después de períodos relativamente cortos de terapia con dosis bajas. Puede presentarse en pacientes de todas las edades. Si bien la incidencia de este síndrome parece ser mayor en los ancianos, especialmente en las mujeres de edad avanzada, es imposible basarse en los estimados de prevalencia para predecir, en el momento de iniciar un tratamiento neuroléptico, cuáles serán los pacientes con posibilidades de desarrollar este cuadro. Los síntomas son persistentes y, en algunos pacientes, parecen ser irreversibles. El síndrome se caracteriza por movimientos rítmicos involuntarios de la lengua, cara, boca o mandíbula (por ej., protrusión de la lengua, fruncimiento de la boca, movimientos de mascar). Algunas veces éstos se acompañan de movimientos involuntarios de las extremidades. En raras ocasiones, estos últimos son las únicas manifestaciones de una disquinesia tardía. También se ha descrito la distonía tardía, una variante de la disquinesia tardía. No se conoce un tratamiento efectivo para la disquinesia tardía; los agentes antiparkinsonianos no alivian los síntomas de este síndrome. En caso de ser clínicamente factible, se recomienda discontinuar la administración de todos los antipsicóticos si aparecen estos síntomas. En el caso de ser necesario reiniciar el tratamiento, aumentar la dosis del agente, o cambiar a otra droga antipsicótica, el síndrome puede resultar enmascarado. Se informó que la aparición de movimientos coreicos finos de la lengua puede constituir un signo temprano del síndrome, y si se interrumpe la terapia en ese momento, es posible que el cuadro no se desarrolle. Reacciones adversas informadas con STELAZINE® Comprimidos u otros derivados fenotiazínicos:los efectos adversos con las diferentes fenotiazinas varían en tipo, frecuencia y mecanismo de ocurrencia; así, algunos están asociados a la dosis, mientras que otros se vinculan a la hipersensibilidad individual del paciente. Algunos efectos adversos pueden presentarse con mayor frecuencia o intensidad en pacientes que están cursando problemas médicos específicos (por ej., los pacientes con insuficiencia mitral o feocromocitoma experimentan hipotensión severa después de recibir ciertas fenotiazinas a las dosis recomendadas). No todos los efectos adversos mencionados a continuación se observaron con cada uno de los derivados fenotiazínicos, pero se informaron con uno de ellos o más y, por lo tanto, deberían tenerse en cuenta cuando se administran fármacos de esta clase: síntomas extrapiramidales (opistótonos, crisis oculógiras, hiperreflexia, distonía, acatisia, disquinesia, parkinsonismo), algunos de los cuales pueden durar meses y aun años, especialmente en los pacientes ancianos con daño cerebral previo; convulsiones del tipo gran mal y petit mal, particularmente en pacientes con anormalidades en el EEG o antecedentes personales de esta clase de trastornos; alteración de las proteínas en el líquido cefalorraquídeo; edema cerebral; intensificación y prolongación de la acción de depresores del SNC (opiáceos, analgésicos, antihistamínicos, barbitúricos, alcohol), atropina, calor, insecticidas organofosforados; reacciones autonómicas (sequedad de boca, congestión nasal, cefalea, náuseas, constipación, obstipación, íleo adinámico, trastornos en la eyaculación/impotencia, priapismo, colon atónico, retención urinaria, miosis y midriasis); reactivación de procesos psicóticos, estados de tipo catatónico; hipotensión (ocasionalmente fatal); paro cardíaco; discrasias sanguíneas (pancitopenia, púrpura trombocitopénica, leucopenia, agranulocitos, eosinofilia, anemia hemolítica, anemia aplástica); daño hepático (ictericia, estasis biliar); trastornos endócrinos (hiperglucemia, hipoglucemia, glucosuria, lactación, galactorrea, ginecomastia, trastornos menstruales, pruebas de embarazo falsamente positivas); alteraciones dermatológicas (fotosensibilidad, ardor, eritema, urticaria, eccema a dermatitis exfoliativa); otras reacciones alérgicas (asma, edema laríngeo, edema angioneurótico, reacciones anafilactoides); edema periférico; inversión del efecto epinefrínico; hipertermia; aumento del apetito; aumento del peso corporal; síndrome símil-lupus eritematoso; retinopatía pigmentosa; con la administración prolongada de dosis altas: pigmentación cutánea, queratopatía epitelial, y depósitos lenticulares y corneales. En algunos pacientes que estaban recibiendo tranquilizantes fenotiazínicos se observaron cambios electrocardiográficos, particularmente inespecíficos, usualmente alteraciones reversibles de las ondas Q y T. Si bien las fenotiazinas no producen dependencia psíquica ni física, la interrupción repentina de los tratamientos prolongados puede provocar síntomas temporarios (por ej., náuseas y vómitos, mareos, temblores). Nota:ocasionalmente ha habido reportes de muerte súbita en pacientes tratados con fenotiazinas. En algunos casos, la causa aparente fue paro cardíaco o asfixia debida a la inhibición del reflejo de la tos.
Precauciones
Debido a la probabilidad de que algunos pacientes tratados con neurolépticos en forma crónica desarrollen disquinesia tardía, se aconseja que todos los sujetos que requieran un tratamiento crónico reciban, en lo posible, información completa acerca de este riesgo. La decisión de informar a los pacientes y/o sus tutores deberá basarse, obviamente, en las circunstancias clínicas y la competencia del paciente para comprender la información proporcionada. Se refirieron casos de trombocitopenia y anemia en pacientes tratados con STELAZINE® Comprimidos. También se comunicaron casos de agranulocitosis y pancitopenia (se deberá advertir a los pacientes la necesidad de informar la aparición súbita de dolor de garganta u otros signos de infección). Ante la aparición de signos de depresión medular en el recuento total y diferencial de glóbulos blancos, se deberá discontinuar el fármaco e instituir un tratamiento antibiótico. Asimismo se informó ictericia por hepatitis o daño hepático de tipo colestático. Si se presentaran síntomas de tipo gripal, deberán realizarse estudios adecuados para evaluar la función hepática. En caso de detectarse una anormalidad, discontinuar el tratamiento. Un resultado de la terapia puede ser el incremento de la actividad física y mental. Por ejemplo, algunos pacientes con angina de pecho se quejaron de un aumento del dolor mientras recibían el fármaco. Por lo tanto, se deberá mantener una estricta vigilancia de los pacientes con angina y, en caso de presentarse una respuesta desfavorable, deberá suspenderse el tratamiento con STELAZINE® Comprimidos. En pacientes con afecciones cardiovasculares deben evitarse las dosis altas y la administración parenteral, debido a la posibilidad de desarrollar hipotensión. En caso de presentarse signos de hipotensión luego de la administración del fármaco, colocar al paciente con la cabeza hacia abajo y las piernas elevadas. En caso de ser necesario un vasoconstrictor, se recomienda utilizar levarterenol o clorhidrato de fenilefrina. Otros agentes presores, incluyendo la epinefrina, no deberían ser usados por que pueden causar un descenso paradojal de la presión arterial. Debido a que se ha informado que ciertas fenotiazinas producen retinopatía, deberá discontinuarse el tratamiento con STELAZINE® Comprimidos, si los estudios oftalmológicos o del campo visual demostraran cambios retinales. El efecto antiemético de STELAZINE® Comprimidos puede enmascarar los signos y síntomas de toxicidad o sobredosis de otras drogas tóxicas y obstaculizar el diagnóstico de condiciones tales como obstrucción intestinal, tumor cerebral y síndrome de Reye. Con la administración prolongada a dosis altas, debe tenerse presente la posibilidad de que se produzcan efectos acumulativos, con la aparición repentina de síntomas graves a nivel del SNC o del sistema vasomotor. Los neurolépticos elevan los niveles de prolactina; la elevación persiste durante la administración crónica. Los cultivos en tejidos indican que aproximadamente un tercio de los cánceres de mama en humanos son prolactino-dependientesin vitro, un factor de potencial importancia si contempla la prescripción de estos fármacos en una paciente con cáncer de mama detectado previamente. Si bien se comunicaron casos de galactorrea, amenorrea, ginecomastia e impotencia, se desconoce la significación clínica de los niveles plasmáticos de prolactina elevados para la mayoría de los pacientes. Se informó un aumento en la incidencia de neoplasias mamarias en roedores luego de la administración crónica de neurolépticos. Sin embargo, ni los estudios clínicos ni los epidemiológicos realizados hasta el momento han demostrado una asociación entre la administración crónica de estos fármacos y la aparición de tumores mamarios; se considera que la evidencia disponible es demasiado limitada para formular conclusiones al respecto. Se informaron aberraciones cromosómicas en los espermatocitos y alteraciones en el esperma de roedores tratados con ciertos neurolépticos. Se deberán extremar las precauciones en aquellos pacientes expuestos a temperaturas elevadas debido a que las fenotiazinas pueden interferir con los mecanismos termorregulatorios. Como ocurre con el resto de los fármacos que ejercen un efecto anticolinérgico y/o provocan midriasis, la trifluoperazina deberá utilizarse con cuidado en los pacientes con glaucoma. Las fenotiazinas pueden disminuir el efecto de los anticoagulantes orales. Las fenotiazinas pueden producir bloqueo alfa-adrenérgico. La administración concomitante de propranolol con fenotiazinas aumenta los niveles plasmáticos de ambas drogas. El uso concomitante de fenotiazinas puede contrarrestar los efectos antihipertensivos de la guanetidina y sus derivados. Las tiazidas pueden acentuar la hipotensión ortostática que en ocasiones se presenta con el uso de fenotiazinas. Las fenotiazinas pueden reducir el umbral convulsivo; por lo tanto, se deberán realizar ajustes a los regímenes posológicos de anticonvulsivantes. No se observó potenciación de los efectos anticonvulsivantes. Sin embargo, se informó que las fenotiazinas pueden interferir con el metabolismo de la fenitoína y, por lo tanto, precipitar su toxicidad. Se debe evitar el uso concurrente de metrizamida con derivados de la fenotiazina u otros agentes que reduzcan el umbral convulsivo. Al igual que ocurre con el resto de los derivados de la fenotiazina, se deberá interrumpir la terapia con STELAZINE® Comprimidos, como mínimo 48 horas antes de efectuar una mielografía, y no se deberá reiniciar el tratamiento hasta después de 24 horas de realizado el procedimiento. Tampoco deberá utilizarse metrizamida para controlar las náuseas y los vómitos que se produzcan antes o después de efectuar la mielografía. La presencia de fenotiazinas puede producir resultados falsamente positivos en los análisis para determinar la existencia de fenilcetonuria. Tratamientos prolongados:para disminuir la posibilidad de que se produzcan reacciones adversas asociadas a la acumulación del fármaco, los pacientes con una historia de tratamiento prolongado con STELAZINE® Comprimidos y/u otros neurolépticos, deberán ser evaluados periódicamente para determinar si se reduce la dosis de mantenimiento o se interrumpe la terapia.